Cuando fugado como ladrón en la oscuridad escape de ti,
Sin conocer el verdadero amor, y desesperado corría,
El pretexto que no era el mejor, solo funcionaba tratando herirte,
El desafío de arremeter contra ti con infidelidad…
Pero un buen día llego cuando desafiando me dijiste que me fuera,
Pero a la vez, me querías retener… diciendo lo incapaz de vivir sin ti,
Como un adolescente me retire de tu lado, angustiado, un trago amargo,
Cosas en mi cabeza que no podía pensar, sin reflexión alguna.
La primera noche llego, un colchón en el suelo, prestado,
Una habitación que no era mía, igual que el colchón,
Y la temperatura de invierno que se hacia notar en mi espalda,
Solo una pequeña frazada arropaba esa primera noche de soledad.
Con mucha tristeza… ¡como olvidarte! ¡Como haré para sacarte de mi mente!
Cada día que pasaba era un tormento, pero poco a poco me fui acostumbrando,
Melancolía de pensar en la comodidad de una esposa que me espera,
Ahogando un pensamiento rodeado de amigos, al alcance un consuelo.
Matando mi tiempo sin control, un consuelo con polleras, acariciaba mi rostro,
Manteniéndome firme en mi postura, continúe en la búsqueda del olvido,
De a poco fui retirando sentimientos de afectos sin amor,
Y mi dolor por herirte fue desapareciendo de apoco.
Resentimientos, reproches y hostigamiento fueron tus dardos que recibí de ti,
Pero el tiempo que puso lo suyo… el sedimento de vida y amor que tapo las grietas,
Hoy todo termino, son muy pocos los recuerdos, nada me molesta de ti,
Solo algún buen momento recordado, coloca una sonrisa por ti en mi corazón.-
Charly Gómez Re
27/06/2010
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